Water Challenge nació para poner fin a los vertidos de fluidos contaminados, con vertido cero (ZLD) y dando respuesta a la escasez del agua.
Water Challenge cumple con los desafíos medioambientales de la Unión Europea, de la Blue Economy y el “Green Deal”, y con los objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas.