El proyecto ClearFlow, coordinado por Water Challenge, tiene como objetivo validar una solución híbrida para el tratamiento de aguas contaminadas procedentes de la minería. A lo largo de 30 meses, este proyecto internacional desarrollará un sistema que combina electrocoagulación con la tecnología patentada ASEC, para lograr una depuración avanzada, eficiente y con generación de residuos valorizables.
La iniciativa está cofinanciada por el programa Eureka/Eurostars, con apoyo de la Unión Europea, y cuenta con la participación de Hofitech (Eslovaquia), socio tecnológico especializado en separación de metales y optimización de procesos electroquímicos.
El sistema se ha diseñado para obtener agua de alta pureza, libre de metales disueltos y sales, junto con residuos sólidos secos que puedan aprovecharse comercialmente, especialmente por su contenido en metales pesados, tierras raras y otros elementos estratégicos.
El proyecto se estructura en tres fases: caracterización de efluentes mineros, integración de las tecnologías y validación del prototipo en un entorno industrial real en colaboración con el socio eslovaco.
ClearFlow supone un avance hacia una economía circular en el sector minero, al evitar vertidos contaminantes, reducir el volumen de residuos y recuperar tanto el agua como los materiales de valor que contienen estos efluentes.