Water Challenge presenta su primera planta piloto en el Puerto de Huelva para el tratamiento de dragados con vertido cero

Water Challenge ha presentado oficialmente su primera planta piloto para el tratamiento de fluidos contaminados en el Puerto de Huelva, un hito clave tras varios años de investigación y desarrollo tecnológico. La instalación, ubicada en el Muelle Ingeniero Juan Gonzalo, se convierte en la primera de su tipo capaz de recuperar el 100 % del agua contenida en dragados y aguas portuarias, sin vertidos y con un consumo energético muy bajo.

Esta planta, basada en la tecnología ASEC (Adiabatic Sonic Evaporation & Crystallization), permite separar agua purificada y sólidos secos con potencial de valorización comercial. Todo ello sin necesidad de utilizar productos químicos ni consumibles, y con un consumo energético inferior a 20 kWh/m³. La solución ha sido validada por el CSIC y la Universidad de Sevilla, y se ha concebido con un diseño modular en contenedores transportables, lo que facilita su implementación en distintos entornos industriales o portuarios.

Durante el acto de presentación, que reunió a más de 120 asistentes, la CEO de Water Challenge, Susana García, destacó que esta planta piloto representa el paso definitivo hacia la fase comercial de la tecnología:

“Es un ejemplo tangible de cómo la innovación tecnológica puede ofrecer soluciones sostenibles y eficientes en sectores estratégicos. Así entendemos la industria del futuro: tan competitiva como limpia.”

Por su parte, el presidente del Puerto de Huelva, Alberto Santana, subrayó el carácter pionero de esta colaboración:

“Esta planta podrá suponer una solución eficaz y sostenible para separar el agua de los sólidos. Es una apuesta más del puerto por la sostenibilidad, y un paso adelante para gestionar mejor los materiales de dragado y las aguas de lluvia del entorno.”

También participaron representantes del ámbito científico, institucional e industrial, como la alcaldesa de Palos de la Frontera, Milagros Romero, quien valoró el impacto positivo del proyecto en la gestión del agua y el desarrollo sostenible de la comarca.

Este proyecto ha sido cofinanciado por la Comisión Europea a través del programa EIC Accelerator, con una inversión máxima de 3,5 millones de euros.